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En el 80 Aniversario de su nacimiento:

La Casa Real del Reino de Araucanía y Patagonia celebra Cumpleaños del Príncipe Felipe

Foto: Príncipe Felipe, Reynaldo Mariqueo y Laurence Ben Maamer

Por Reynaldo Mariqueo 28 de marzo, 2007

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Foto: Príncipe Felipe recibe poncho de Lonko de manos de Reynaldo Mariqueo y Laurence Ben Maamer (Mapuche residente en Francia)

En "Le Pavillon Dauphine" de Paris, Francia y en un ambiente colmado de simbolismo y tradición, la Casa Real del Reino de Araucanía y Patagonia conmemoro el pasado 23 de febrero, los 80 años del aniversario del nacimiento de Su Alteza Real, el Príncipe Felipe de Araucanía y Patagonia. En la cena de honor participaron diversos dignatarios, miembros administrativos de las diversas instituciones que conforman La Casa Real, así como los consejeros del Reino e invitados especiales. Adornaban el salón de recepción el pabellón y emblema del Reino y a la entrada del Príncipe Felipe se entono el himno nacional del Reino de Araucanía y Patagonia.

Un poncho de Lonko (1) y una tarjeta diseñada con símbolos mapuche, con los nombres y firmas de una treintena de comuneros, lonko y dirigentes mapuches del Wallmapu y de Europa, fue entregado al Príncipe Felipe por mano de Reynaldo Mariqueo, miembro del Consejo del Reino. El hecho que algunos de los que firmaban la tarjeta se encuentran confinados en cárceles de la ciudad Temuco conmovió visiblemente al Príncipe Felipe e hizo que lo mencionara en su alocución a los asistentes, transmitiendo de esta forma un mensaje sombrío sobre la realidad de un pueblo que sigue resistiendo la ocupación de su territorio y exigiendo el respeto de sus derechos soberanos.

Ha transcurrido más de un año del lamentable fallecimiento de la Princesa Elisabeth en enero de 2006, esposa del Príncipe Felipe, según comentarios de sus amigos más cercanos solo ahora comienza a recuperarse de la tragedia que lo afecto profundamente. También en enero de ese año (2006) el Príncipe junto a una comitiva tenían previsto viajar al Wallmapu, después que fuera invitado por autoridades políticas y religiosas del pueblo mapuche. Consultado sobre la posibilidad de responder esta invitación en un futuro cercano, el Príncipe me respondió que: "Este se podría concretar, pero que su viaje había que organizarlo en coordinación con el encargado de las relaciones con las comunidades y organizaciones mapuche y Consejero del Reino, Gastón Lion.

A pesar de sus 80 años, el Príncipe Felipe o peñi (hermano) Felipe como le decimos con afecto algunos mapuches que lo conocemos por años, conserva plenamente su lucidez mental y compostura de hombre digno, decente e íntegro y -como lo constatara personalmente hace unas semanas pasadas- esta reiniciando sus funciones normales con el vigor que lo caracteriza.

Conexión mapuche-francesa

Para aquellos que desconocen la historia del Reino de Araucanía y Patagonia y su conexión francesa, es importante señalar que su fundación en 1860, fue el producto de un fluido intercambio de opiniones entre las autoridades mapuches y el ciudadano Francés naturalizado Mapuche Orelie-Antoine de Tounens. Las autoridades mapuches lanzaron su Gobierno unitario, en momentos que los estados de Chile y Argentina se preparaban para invadir el país mapuche, la necesidad de modernizar el ordenamiento institucional tradicional, que les permitiera establecer una nueva relación y en un mismo nivel con las republicas vecinas se hacia apremiante, así como lograr el reconocimiento a la independencia de la nación Mapuche y en lo posible apoyo de los países de Europa.

En efecto, el 11 de noviembre de 1860 finalizo en el Wallmapu un periodo de consulta popular sobre el nuevo proyecto de gobierno y el 17 de noviembre del mismo año, después de cuatro días de deliberaciones concluía un Futha Koyag (Gran Parlamento) con la aprobación de una constitución y la proclamación de Orelie-Antoine de Tounens como el Primer Regente del estado Mapuche. El evento incluía también un acto cívico-militar, la celebración de un Nguillatun, (ceremonia religiosa) y, como es habitual en la tradición mapuche, finalizaba con una fiesta de convivencia en celebración de la fundación del Reino de Araucanía y Patagonia en el Wallmapu.

Hay que hacer notar que el establecimiento de una monarquía constitucional y hereditaria, fue la decisión libre y soberana de un pueblo que ejercía su libre determinación en su territorio ancestral. Como es sabido el territorio mapuche nunca formo parte del Imperio Español, que reconoció la independencia de la nación Mapuche en 1641 en el tratado de Killen, en el cual se estableció la frontera entre ambos pueblos, frontera que subsiguientemente fuera ratificada por España en una treintena de tratados.

Es importante señalar que la representatividad y legitimidad del Reino de Araucanía y Patagonia nunca fue puesta en duda por los mapuches y no existen evidencias que señalen la existencia de discrepancias entre las autoridades mapuches en el momento de su fundación. El otro factor importante a considerar, es el hecho que los toki y lonko (autoridades mapuches) que participaron y posteriormente ratificaron su apoyo a la formación del Reinado lo integraban, el Toki Kilapan y los lonko : Montril, Quilahueque, Calfouchan, Marihual y los lonko del Puelmapu encabezados por el Toki Kalfukura, todos ellos héroes indiscutibles del pueblo mapuche. Es importante enfatizar también que los lonko mencionados se ganaron un lugar destacado en nuestra historia porque estuvieron al frente de la lucha en defensa de la soberanía mapuche, agredida por las republicas de Chile y Argentina. El coraje, inteligencia y miras de futuro que demostraron, su admirable actuación en ese periodo crucial de nuestra historia, es la mejor carta de presentación del Reino de Araucanía y Patagonia a la comunidad internacional.

Una voz solidaria desconocida por los mapuches

Consecuente con el legado histórico heredado de los monarcas que establecieron y sustentaron el Reino de Araucanía y Patagonia, el Príncipe Felipe por decenios fue la voz solitaria en Europa de denuncia y condena de la violación de los derechos humanos de los mapuches. Si bien es cierto los mapuches siempre han protestado por el robo de sus territorios, los atropellos e injusticias cometidos contra de ellos, así como exigido el respeto de sus derechos de pueblo, pero sus voces no eran escuchadas o simplemente silenciadas por los estados opresores.

El Príncipe Felipe -como lo hicieron sus antecesores- continuamente ha salido a la palestra en defensa de la verdad, siempre alerta a rectificar, desmentir o clarificar declaraciones hechas por diplomáticos o portavoces de las republicas de Chile y Argentina, sobre la historia Mapuche y la creación del Reino de Araucanía y Patagonia; les molesta, en particular, la presencia de la Casa Real del Reino Mapuche en el exilio que a pesar de la campaña de descrédito sigue existiendo después de 147 años de su fundación.

Revisando algunas informaciones publicados por periódicos chilenos y argentino sobre el Reino Mapuche, me llamo la atención una entrevista dada por el periodista chileno (radicado en Paris) Juan Angel Torti a un periódico Santiaguino (Chile *). En su entrevista Torti describe al Príncipe Felipe de: elegante, sofisticado, culto y absolutamente convencido de su estirpe real , y contestando a la pregunta si en Francia se comenta sobre el Príncipe Felipe, le responde: "Este señor no lo permite y no duda en entablar una demanda si lo contravienen" y agrega. "Aquí se han reído mucho de su historia" (1). Debo confesar que comparto con la descripción del Príncipe, sin embargo dudo que el Príncipe se oponga a que hablen de el y no creo la ultima frase que -por lo demás- no tiene sentido por la contradicción en términos.

El Príncipe Felipe no solo es una persona de estirpe noble, también sustenta nobles ideales por su aporte en sostener una lucha histórica por la restitución de los derechos del pueblo Mapuche, por mantener viva la memoria de los fundadores del Reino, nuestros padres de la patria Mapuche. El reconocimiento de su titulo dinástico por un Tribunal Francés en junio de 1971 como el legítimo sucesor del Reino de Araucanía y Patagonia significó también un reconocimiento implícito de la Monarquía Mapuche, situación que obviamente ha indignado a sus enemigos que son también enemigos del pueblo Mapuche.

Además de mantener vigente la Casa Real del Reino de Araucanía y Patagonia el Príncipe Felipe, se ha destacado en sus actividades profesionales, funciones publicas y meritos personales; fue decano y profesor de una Casa de Altos Estudios de Paris, periodista, escritor, fundador y/o representante de una serie de instituciones profesionales, sociales, militares, culturales y. es héroe nacional de la Republica Francesa. Cuenta con un impresionante currículum y, entre los honores recibidos, se destaca la distinción en 1992 de Commandeur de l'Ordre des Palmes Academiques por decreto del Gobierno Francés; en el año 2002 la Medaille de la Reconnaissance de la Nation y, en 1999 Officier de l'Ordre des Arts et des Lettres, además de recibir en 1969 el Chevalier de L'Ordre National du Merite del Gobierno Francés.

La lista de distinción y homenajes otorgado al Príncipe Felipe por las autoridades francesas es larga, a ello hay que sumar un numero no menos apreciables otorgados por otros países como la Croix des Veterans of Foreing Wars de Estados Unidos de América, la Croix de Guerra Polonaise avec glaive de Polonia y del Vaticano la The Croix d'Or Pontificale de 1era classe de Latran. Hoy a pesar de su avanzada edad sigue vinculado, en diversos grado, con numerosas asociaciones académicas y ejerciendo el cargo de Presidente Nacional de Combatientes Voluntarios de la Resistencia, organismo que agrupa aquellos que resistieron la invasión nazi, durante la Segunda Guerra Mundial.

El Príncipe Felipe y su compromiso con la Lucha del pueblo Mapuche

La convicción del Príncipe Felipe sobre la justeza de la lucha del pueblo Mapuche por sus derechos ha sido y es el motor que le da la energía y determinación para mantener vigente la Casa Real del Reino de Araucanía y Patagonia, porque forma parte inherente de la soberanía mapuche. Este cometido le permitió informar a la opinión publica europea sobre la situación histórica y actual del pueblo Mapuche, generando como consecuencias reacciones hostiles de parte de la institucionalidad chilena/ argentina. Los ataques injuriosos contra el Príncipe Felipe por ciertos 'historiadores' y 'periodistas' winka (criollos) que obedeciendo a una ideología racista y jingoísta, se oponen a las reivindicaciones territoriales de la nación Mapuche, quizás sea el mejor indicativo de lo acertado de su misión en el cumplimiento de su rol histórico de Soberano del Reino de Araucanía y Patagonia.

En el gran salón de 'Le Pavillon Dauphine', cuando le indique que uno de los firmantes de la tarjeta de su cumpleaños era la Lonko Juana Calfunao y que lo hacia desde la Cárcel de Temuco, la misma Lonko que (en agosto de 2006) le otorgara la Medalla de Honor, el Príncipe Felipe no pudo contener su emoción y una ligera neblina empaño sus ojos, mientras repetía ¡desde la Cárcel de Temuco! como que le costaba digerir la noticia. Es difícil imaginarse cual eran sus pensamientos en esos instantes, pero de lo que estoy seguro, es que la lucha de la Lonko Calfunao por justicia y libertad del pueblo Mapuche, además de ser una lucha que él la lleva en su corazón, se asemeja mucho a su lucha por la liberación de Francia por la que él tan apasionadamente luchara en su juventud y por la que hoy recibe merecidamente un amplio reconocimiento de la Republica Francesa.

No hay que olvidar que el movimiento anti-nazi Francés fue también considerado ilícito y sus acciones de resistencia catalogado como actos terroristas. Los mapuches no usan armas de fuego ni bombas y su organización social data antes de la llegada de los españoles al continente americano en 1492. Sin embargo el actual gobierno democrático chileno, clasifica aquellas comunidades y sus autoridades que reclaman la restitución de sus tierras, como organización ilícita y las protestas de acción directa como actos terroristas. Hoy, y en respuesta a la presión internacional el gobierno chileno ha prometido públicamente no aplicarles a los activistas mapuche la Ley antiterrorista, pero sin embargo, en los hechos lo esta haciendo porque los métodos carcelarios y de apresamiento, así como los procesos legales son indistinguible con aquellos utilizados por dicha legislación.

El Gobierno chileno por encargo de empresas forestales y latifundistas mantiene detenidos a una veintena de mapuches acusados de pertenecer a asociaciones ilícitas y terroristas, entre ellos a la Lonko Juana Calfunao, su hermana Luisa, su esposo Antonio Cadin y sus dos hijos Jorge y Waikilaf, este ultimo se encuentra relegado en una Cárcel de Alta Seguridad en la ciudad Santiago a 875 km. de su comunidad natal. Todos se encuentran detenido por luchar por los derechos de su comunidad y, como lo han denunciado diversas organizaciones de derechos humanos internacionales, han sufridos tratos crueles, inhumanos y degradantes.

El sistema judicial chileno ha sido reiteradamente cuestionado por los mapuches y por los expertos en la materia por la falta de un debido proceso con los imputados y la irregularidad y vicios procesales contra ellos. En muchos casos los imputados no se les informa de su estado procesal y los detalles de las acusaciones en su contra, como le pasara a Waikilaf, quien fuera formalizado después de 6 meses de su detención.

Los mapuches no pueden seguir aceptando los abusos judiciales, el hecho que muchos de ellos son procesados dos o más veces por la misma causa, deja ver la existencia de una clara persecución política en contra los mapuches. Otros han permanecido años en prisión y después declarados inocentes, sin ninguna reparación por los daños causados, situación que afecta al Lonko José Cariqueo, quien permaneció por años en prisión en la cárcel de Angol, antes que fuera declarado inocente y puesto en libertad. Sin embargo el 21 de marzo pasado fue nuevamente formalizado por el Tribunal Oral de Collipulli y sin mayores explicaciones le curso una "orden de arraigo en la zona", impidiéndole salir fuera de ella para cumplir sus funciones de autoridad mapuche del Gulumapu.

El caos del sistema jurídico chileno es tal que no es una sorpresa que dirigentes y autoridades mapuches tradicionales opten por pasar a la clandestinidad o asilarse porque simplemente los tribunales chilenos no son competentes, no son independientes ni imparciales, por lo tanto no les garantizan a los mapuches un juicio justo, tal es el caso del Werken José Huenchunao, dirigente de la Coordinadora Arauco-Malleco, quien permaneció en la clandestinidad por mas de tres años. Su detención su produjo el 20 de marzo pasado y condenado a 10 años de prisión por presunta infracción a la Ley Antiterrorista.

En mi opinión la Casa Real puede y debe jugar un papel mas activo en la denuncia, a nivel de Naciones Unidas, sobre las anomalías del Estado de Derecho chileno aplicado en el territorio Mapuche, así como indagar las formas de su reemplazo con la intervención de ésta. Esto considerando que las leyes chilenas al sur del río Bio-Bio son aplicadas de hecho y no de derecho, porque según se ha establecido, carecen de bases jurídicas para ser implementadas en el territorio Mapuche. El mandato legal y moral adquirido por la Casa Real en 1860, le otorga la autoridad suficiente para realizar este tipo de gestiones a nivel internacional.

La vigencia de la Casa Real de Araucanía y Patagonia

La permanente lucha del pueblo Mapuche por la restitución de su territorio y por el respeto de sus derechos fundamentales de pueblo, es una comprobación del fracaso de la política de asimilación, disfrazada de "integración", impulsada por las republicas de Chile y Argentina. Por otra parte las promesas de un "nuevo trato con las 'etnias' indígenas", que lleva mas de tres años de haber sido recomendada por la "Comisión Verdad Histórica y Nuevo Trato con los Pueblos Indígenas", sigue siendo letra muerta, sin que siquiera existan indicios de ser implementadas por las autoridades chilenas, excepto como cita de discursos de buenas intenciones para apaciguar las protestas mapuches y calmar la preocupación de organismos internacionales.

A esto se suma la incapacidad del Gobierno Chileno de buscar una salida política negociada con la nación Mapuche, creando la frustración de un número creciente de comunidades rurales que se movilizan por sus derechos, quienes encuentran una feroz represión que resultan en allanamientos y el uso de la fuerza desproporcionada de parte de los servicios de seguridad chilenos. El número de presos políticos, exiliados y relegados mapuches crece producto de esa política insensata, pero también es un indicativo que la lucha mapuche lejos de disminuir se acrecienta.

Como es de conocimiento público, la respuesta del estado Chileno a estas acciones se traduce en violaciones a los derechos humanos y la militarización del territorio mapuche. La criminalización de la lucha mapuche por sus derechos ha sido condenada por las más importantes organizaciones de derechos humanos internacionales, sin que hasta ahora el Gobierno Chileno modifique su política, sustentada por legislaciones y métodos carcelarios introducidos durante la dictadura del régimen militar.

Frente a esta situación se ve necesario recurrir a todas las formas pacifica de lucha y utilizar los instrumentos legales a nuestra disposición que nos legaron nuestros antepasados, se hace necesario también fortalecer la Casa Real del Reino de Araucanía y Patagonia, símbolo de unidad nacional que ha permanecido intacta en el tiempo y porque es nuestro patrimonio institucional que los estados de Chile y Argentina no han podido controlar ni destruir.

En mi encuentro con el Príncipe Felipe el mes pasado y comentando este tema me reitero que "el Reino de Araucanía y Patagonia fue inicialmente creado e integrado por mapuche y que la actual participación mapuche en la Casa Real, significaría reafirmar los objetivos que le dieron origen". La participación de mapuches también será un indicativo que las medidas tomadas por nuestras autoridades en 1860 no fue en vano, que la soberanía inherente del Reino sigue vigente y que los esfuerzos de los descendientes del Rey Orelie Antoine 1º en mantener vigente la Casa Real en el exilio están dando resultados.

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Nota: Palabras mapuche usadas en este artículo

Poncho de Lonko = manta con diseños distintivos usado por los lonko
Lonko = Jefe político, autoridad mapuche
Peñi = hermano
Wallmapu = nombre del territorio mapuche - Araucanía y Patagonia
Nguillatun = ceremonia religiosa
Toki = jefe militar, jefe supremo de la nación
Winka = chileno u argentino, criollo, extranjero
Puelmapu = Patagonia (territorio mapuche ocupado por Argentina)
Gulumapu = Araucania (territorio mapuche ocupado por Chile)
Werken = mensajero, enviado especial, secretario

* (1) = Las Ultimas Noticias - Santiago, Chile.
http://www.lun. com/ElDia/ detalle_noticia. asp?cuerpo=701&seccion=801&subseccion= 901&idnoticia=C38181883 7226389
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